La procrastinaqué?
¿Te suena estar sentada en el sofá diciendo ya voy a hacer el proyecto, solo un video más..?
O justo cuando dijiste que ibas a estudiar está muy sucia la casa, o los platos, o las plantas faltan regar, o tenés que comprar pan... bueno, creo que se entendió el mensaje.
Según el diccionario: Procrastinar es aplazar una obligación o trabajo.
Pero deliberadamente. Sí, esto quiere decir, tenés el tiempo y la ocasión para hacerlo pero lo aplazas voluntariamente.
La procrastinación es ocuparte de otras cosas cuando dijiste que ibas a (debías) hacer otra .
Es el “lo hago al rato” hasta que llega el momento en que te querés morir, entras en un estado de alarma que se prende fuego todo. ¡Que estrés! Estas a las corridas terminando los proyectos. Y probablemente llegas, pero no se siente muy bien. Terminás agotada.
Te tengo noticias: procrastinar es una conducta adquirida. No nacemos con esta habilidad, sino que la vamos aprendiendo.
Además, tiene más que ver con lo sentimental que con la organización.
Entonces, ¿Por qué procrastinamos? Porque la tarea nos resulta difícil, muy larga o aburrida. Nos genera resistencia, incomodidad. Entonces tratamos de evitarla. Al aplazarla nos sentimos bien, estamos haciendo otras cosas que nos gustan más.
La clave está en preguntarse, ¿Por qué estoy evitando hacer esto? ¿Por qué, de repente, me gusta tanto barrer? 😂
¿Qué de todo lo que conlleva la tarea (que estoy evitando) no me gusta? ¿Cómo podría hacerla más placentera? ¿Es necesario que la haga yo? ¿Puedo delegar?
Es importante recordar porque comenzaste, ¿te querés recibir? O tal vez vivir de tu emprendimiento, o te apasiona ayudar a los demás. Cuál es el propósito de tu tarea.
Algunos consejos:
- Anotá los pasos a hacer en una lista.
- Creá un ambiente libre de distracciones.
- Pensa en comenzar y terminar la tarea.
- Te podés ayudar con la técnica pomodoro, donde te ocupas 25 min y descansas 5.
- Asigna tiempo de preparación, si pensas que esto te lleva una hora, asígnale media más, tené en cuenta el tiempo en que haces el mate, prendes la compu, revisas agendas, etc.
Otra posibilidad: puede suceder que ya no estés interesada en hacer esa cosa, que pensabas que te gustaba y ahora ya no. Ejemplo: un nuevo hobbie. Las macetitas al final no eran lo tuyo. ¡Y está bien! Mutamos continuamente, estamos en constante crecimiento.
O que estemos haciendo cosas por moda o porque comenzamos con alguna amiga. Lo importante es conectar con lo que realmente quiero.
En síntesis:
La próxima vez que estés evitando, o que tengas que terminar un proyecto y de repente cualquier cosa se vuelva más atractiva, preguntate, ¿por qué estoy haciendo esto?
¿Qué estoy tratando de evitar? ¿Qué haría que esta actividad fuera más placentera?
Gracias por llegar hasta acá!
Compartilo y contame si te sirvieron estos consejos. Podés escribirme a elatelierdemeggi
Vamos un día a la vez.. 📚